Baúl Teatro seguirá creando, es un motor en nuestra vida: Elvia Mante
César Tavera y Elvia Mante anuncian en las redes sociales de Baúl Teatro A.C. el fin del y del Festibaúl de Títeres y del Museo La Casa de los títeres, donde venían trabajando de 9 a 18 horas y de lunes a domingo durante 30 años.
“Cerramos el ciclo de una tarea que realizamos desde 1993. Queremos jubilarnos por así decirlo, sin bajarnos de la escena”, expresa Elvia Mante en entrevista para pasodegato.com.
Pensamos que el 30 Festibaúl, sería el último, sin hacerlo público, pero, decidimos hacer este 31 con obras nuestras, gracias a una generosa invitación que nos extendieron el Museo de Historia Mexicana y la Dirección de Cultura del municipio de San Nicolás. He leído las “condolencias” digamos por el anuncio, pero nosotros no sentimos que sea un fallo, no nos estamos retirando porque nos falte salud, o por falta de asistentes, sino que queremos hacer otras cosas el resto de nuestras vidas”, aclara.
Mante explica que sus objetivos en esta labor titiritera, “fueron adaptándose a los tiempos. Abarcamos todas las posibilidades habidas y por haber para reunirnos, traer grupos, hacer talleres, coloquios, encuentros, homenajes, es decir que cumplimos nuestra misión”.
“Y finalmente, el festival fue como una escuela informal para las compañías que venían por el trabajo, las tareas, los maestros, y que implican al arte de los títeres. Juntarnos, analizar nuestros trabajos y llevar a cabo todo esto en un marco de respeto. Y muy enriquecedor para todos”, pero Baúl Teatro seguirá creando, es difícil que lo dejemos porque es un motor de nuestra vida”, expresa satisfecha.
En un año sabático que nos tomamos, inventariamos nuestro acervo; títeres de todo el mundo, libros de producciones, y los estamos ofreciendo a las instituciones para ver si alguna se interesa en tomar la estafeta.
Su colección abarca títeres asiáticos, europeos, muchos mexicanos porque el teatro de títeres está vivo en México, como salimos a muchos festivales, nos traíamos títeres que encontrábamos en el camino o nos iban donando compañeros que venían al festival o a otras programaciones que hacíamos. Y el museo, pues cambió de sede varias veces, de la calle Independencia, que acá es muy popular en Monterrey y después nos movimos al Barrio Antiguo, antes de que fuera zona de antros, y se le daba un impulso cultural a la zona. Y aquí, en el barrio, en la misma cuadra, recuerda, hemos estado en tres direcciones distintas, esta última casa no es tan grande, pero hicimos distintas curadurías, dándole diferentes lecturas, rotando los muñecos, a veces poníamos énfasis en los muñecos de cierto país o de cierta técnica o de cierto material, o de cierto autor.
Para la creación y perfeccionamiento del museo, Elvia y los otros integrantes de la compañía Baúl Teatro, se profesionalizaron con diplomados a nivel maestría en museografía para cimentar lo que iban aprendiendo “con la experiencia”, asegura.
“Participamos en todas las convocatorias que se pudo, acota, para poder mantener el espacio y estamos agradecidísimos con las escuelas que abrieron un área de oportunidad al venir a ver a los títeres; se les daban funciones, se les hacían recorridos por el museo y uno de nuestros objetivos es que nadie se fuera sin manejar un títere por lo menos, y eso fue rico para crear la tradición, y creemos que, en efecto, la gente se acerca más a los títeres”.
Al hablar sobre el contexto actual de los títeres, Elvia afirma que hay más respeto por el género. “Mucha gente ha pasado de usar el títere, así como un elemento más en los montajes que, en realidad, querer informarse de qué se trata el asunto. Las compañías se acercan más seriamente, hay más compañías, hay mucha experimentación”.
Y recuerda, “cuando hacíamos teatro para niños, un día nos fuimos de mochileros a Europa, tuvimos la maravillosa suerte de toparnos con varios festivales de títeres, y sentimos que era el lenguaje que nos faltaba. Regresamos a México y nos empezamos a preparar y a traer maestros, y luego de descubrir los títeres en el contexto europeo, nos encontramos con Jorge Vargas, que se especializó de clown en Cuba, y lo invitamos a que nos dirigiera, y creamos Viajeros en 1991, clown y títeres objeto en un trabajo con el que viajamos mucho”.
“Pero el público nos empezó a cuestionar sobre los títeres, porque los de Viajeros no eran tradicionales, y pensamos que teníamos que enseñar que los títeres podían ser muchas cosas, y empezamos a crear espectáculos técnica por técnica, para irlos acercándolos, títeres de guante, de hilo, y los de vara, y para mí siempre fue un poco doloroso que no haya seguido por el camino de la experimentación y me haya regresado al ABC de los títeres. Que de cualquier forma son tan generosos, que me enseñaron su lenguaje paso a paso, y hemos hecho cosas con mucho respeto al arte de los títeres y a sus posibilidades; lo que agradezco mucho ahora”, dijo.
En 31 ediciones, el Festibaúl recibió a artistas titiriteros de España, Brasil, Argentina, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Nicaragua, Cuba, Francia, Canadá, Rumania, El Salvador, Chile, Estados Unidos, Guatemala, Venezuela e Italia. Igualmente, a titiriteros de casi todo el país. Llevó a acabo Siete Encuentros de Titiriteros de Provincia; Dos Encuentros de Mujeres Titiriteras; Seis coloquios (dirección, mujeres, jóvenes, unipersonales, historia de los Títeres en México, 30 años de la unión internacional de marionetistas de México), cinco muestras de Cajas Misteriosas; presentaciones de libros; homenajes a grandes titiriteros y el Premio Festibaúl a los mejores trabajos presentados.
“La casa ya está cerrada, los títeres embodegados, inventariados y se les ofrece a distintas instituciones que los alberguen. El inmueble como espacio lo vamos a rentar para tener un ingreso a futuro”, aseguró.
Baúl Teatro sigue creando, produciendo y presentándose. Elvia investiga sobre mujeres dedicadas al arte de los títeres y César el recuento de la historia de teatro para niños en la región. “Hay mucho camino por andar todavía”, concluye. La compañía también la integran Angélica Coronado y Antonio Ríos.
Programa del XXXI Festibaúl. La Despedida:
Funciones en la Explanada Museo de Historia Mexicana
TÍTERES DE CACHI CACHI PORRA
– martes, 19:30 horas
GUIÑOL DE PARIS
– sábado 20, 19:30 horas
CUENTOS DEL BAÚL
– martes 23, 19:30 horas
Función en el Gran Parque de las Arboledas de San Nicolás
TÍTERES DE CACHI CACHI PORRA
– sábado 27, 19:00 horas