Cuando nació mi libro Historias de Actores, mi sueño, mi visualización, era juntar a la mayoría de las actrices y los actores con los que he caminado la senda actoral. Quería, como un niño, una fiesta teatral y cinematográfica.
Este collage de fotos muestra sólo a algunos de mis grandes compañeros. Veo al maestro y director teatral Luis de Tavira, a mi querido Chema de Tavira, padrinos ambos del libro. A mi admirada Arcelia Ramírez, al cineasta Jaime Ruiz, al gran Alberto Estrella, a mi querido actorazo Farnesio de Bernal (QEPD), a mi madre de ficción, Adriana Roel (QEPD), mi queridísima «Berenice», Marthita Navarro (QEPD); a las irradiantes, bellísimas y talentosas Tina French y Blanca Guerra; a mi amiga Mayte Morán; al gran actor lagunero Paquito de la Fuente; y a la gran madrina para el nacimiento de mi libro —su apoyo fue fundamental para la edición del ejemplar—, la querida Sofía García Camil, secretaria de Cultura del Gobierno del Estado de Coahuila.
Esa noche estuvieron grandes compañeros de la escena que no aparecen en el recuento de fotos. Recuerdo a mis queridos actores: Emilio Echavarría (QEPD), Marina de Tavira, la gran Sonia Salum, el excelso escritor Felipe Garrido, el guionista de nuestro cine Xavier Robles (QEPD), y mi querida cineasta Guadalupe Ortega; al máster de la escenografía Alejandro Luna (QEPD); a mi siempre querido actor Gastón Melo (QEPD); a mi entrañable dramaturgo Cutberto López; a mi siempre admirado Manuel Ojeda (QEPD); a mi querido director Ignacio Escárcega; y a los queridísimos Uriel Bravo, Tizoc Arroyo, Carlos Aguilar, Alejandro Cuétara, Edgar Alexen, Ricardo Silva, Homero Ferruzca, Ernesto Galán, Rodolfo Guerrero, Ricardo Ezquerra, Aquiles Castañeda, Luis Domingo González y Jorge Monter.
También a las queridas actrices Rosa María Bianchi, Lourdes Echavarría, Yullenni Verti, Socorro Miranda, Alicia Martínez, Margarita Carrillo, Pilar Padilla, Cristina Michaus, Elia Domenzain, Ana Silvia Garza; y a mi gran amiga, delegada de la ANDA, Dulce Angélica. Mis queridas Carmen y Gaby Ambriz. Mis paisanos actores José Juan Meraz y Jorge de los Reyes. Mi hermano del alma, Óscar Sánchez; Jorge Richards y su impecable conducción del evento. Mi querida cuñada Lupita Richards, cuyo apoyo fue fundamental para dar luz a Historias de Actores.
Fue una noche de ensueño, maravillosa. La soñé primero, pero la realidad superó a la fantasía. Algo habremos hecho bien para haber recibido esa enorme alegría que me dieron Dios, mi compañera Elvira y todos ustedes, queridos compañeros actores. Ellas y ellos. Sólo puede decirse: gracias, desde lo más profundo del corazón.
P.D.: Perdón por las omisiones. El collage de fotos apareció hoy por la mañana e hice este ejercicio de memoria. La emoción cubre de nubes la claridad de los recuerdos, mas no su presencia, que va al archivo de lo más sagrado.
Hoy me doy cuenta de que muchos de esos queridos compañeros han partido. Cada uno dejó una gracia de recuerdos en mí. Así parece ser la vida: una carretera de destinos diversos, con paradas en estaciones determinadas, donde algunos pasajeros ya no suben más al destino final de cada quien.
Por cierto, el segundo tomo de Historias de Actores ya lo tengo listo. Ojalá surgiera un patrocinador para la edición del libro.
